https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2025-11/papa-leon-xiv-catequesis-5-noviembre-2025-pascua-jesus.html

 

En la audiencia general del primer miércoles de noviembre, León XIV centra su catequesis en la Pascua y explica que la Resurrección de Cristo es el “acontecimento” que fundamenta la fe, el único capaz de saciar nuestra demanda de sentido de la vida. “En Él tenemos la seguridad de poder encontrar siempre la estrella polar hacia la que dirigir nuestra vida de aparente caos, marcada por hechos que, a menudo, nos parecen confusos, inaceptables, incomprensibles”.
 
Vatican News
 

“El misterio pascual constituye el eje de la vida del cristiano en torno al cual giran todos los demás eventos”: lo afirma el Papa León XIV en la audiencia general de hoy, 5 de noviembre, en la plaza de San Pedro.

El Pontífice centra su catequesis en el tema “La Pascua da esperanza a la vida cotidiana”, la tercera dedicada a “La Resurrección de Cristo y los desafíos del mundo actual”, en el marco del ciclo jubilar “Jesucristo esperanza nuestra”.

Después de haber saludado desde el papamóvil a los numerosos fieles, romanos y peregrinos, que hoy se congregaron en la plaza de San Pedro para escuchar su enseñanza y recibir su bendición, el Santo Padre inicia su reflexión evidenciando que la “Pascua de Jesús es un evento que no pertenece a un pasado lejano”, como “tantos otros episodios de la historia humana” y la Iglesia nos enseña a hacer “memoria actualizante” de la Resurrección todos los años en el domingo de Pascua.

Todos los días es Pascua

El Obispo de Roma analiza las diversas experiencias que vive el ser humano: “dolor, sufrimiento, tristeza, entrelazadas con alegría, estupor, serenidad” y subraya que en cada situación, “el corazón humano anhela la plenitud, una felicidad profunda”. Y para explicar mejor el misterio de la persona humana se remite a una gran filósofa del s. XX, Santa Teresa Benedicta de la Cruz -cuyo nombre secular fue Edith Stein: «El ser humano -escribe la santa- anhela siempre volver a recibir el don de la existencia, para poder alcanzar lo que el instante le da y, al mismo tiempo, le quita». “Estamos inmersos en el límite – señala el Papa – pero también tendemos a superarlo”.